2.10.08

La columna, edición del 2 de Octubre de 2008

Empresas familiares


Negocios que son bienes gananciales

El despliegue de energía que demanda cualquier empresa puede combinarse con el combo de emociones intensas que requiere sostener una pareja. Las condiciones para que eso suceda son apenas un puñado y muy factibles de llevarse a cabo.

Para muchas parejas el compromiso de acompañarse “en la alegrías y en el dolor, en la salud y en la enfermedad, para amarte y respetarte…” incluye también los negocios. Ellos han elegido a la persona con la que comparten la vida para arriesgarse a vivir el desarrollo de una empresa y apuestan a hacer funcionar juntos, la casa y el trabajo.

¿Pueden conjugarse la intensidad de gestionar un emprendimiento con el torbellino de profundas emociones que conlleva sostener una pareja? ¿Cuáles son las condiciones de equilibrio?

Si bien los negocios de pareja son un formato más dentro del universo de las empresas familiares, quizás sean en los que se hace más patente el desafío de congeniar dos mundos tratando de lograr que ambos crezcan y se fortalezcan con la experiencia.

Reglas claras

A pesar de que la posibilidad de trabajar con la persona en la que uno más confía en el mundo es tentadora, no siempre lo que funciona en el plano de lo privado es extrapolable a lo público. Y trabajar y vivir todo el día juntos requiere que se establezcan parámetros claros.

Encontrar el papel de cada uno debe ser una prioridad desde el principio. Pero más que adjudicar funciones automáticamente por cuestiones de género y costumbre, “él lidera, ella administra”, se hace necesario reconocer las aptitudes individuales, evaluar puntos fuertes y descubrir áreas de especialidad y también de interés y gusto.

La otra cara

Aún cuando los roles se han asumido y aceptado, a veces la competencia destruye la sociedad y hasta la pareja. No es fácil de aceptar, para quien mira esto desde la comparación y no desde el reconocimiento, que su socio/ a gane más, que adquiera mayor fama por su trabajo, logre éxitos mayores en su área o consiga una mejor relación con los empleados. También es complejo comprender que la persona que en casa nutre, acompaña y sostiene, en el negocio se transforme en un implacable negociador, un adalid de las ventas o un creativo brillante. Y el problema es que cuando se ubica al otro en el lugar de contrincante, es casi imposible disociar esta rivalidad laboral de la convivencia cotidiana.

Definiciones

Las expectativas mutuas deben ponerse sobre el tablero. ¿Espero de mi socio lo mismo que de mi marido? ¿Soy capaz de entenderle las mismas actitudes que en casa? ¿Las cosas que me molestan de mi mujer van a desaparecer en la oficina? Si me da celos que charle con un padre en la reunión del colegio ¿podré bancarme que viaje por negocios? En estas sociedades todo se hace muy personal, y se requiere compartir la visión que ambos tienen de lo que implica “trabajar juntos”.

También es importante definir espacios, horarios y modos de trabajo. Y establecer un sistema para la toma de decisiones conjunta. ¿Qué sucederá cuando no están de acuerdo? ¿Actuarán como cuando adoptan resoluciones sobre la crianza de los hijos o en la compra de la casa? Reconocer como funciona todo en el hogar ayuda a establecer qué herramientas pueden seguir usándose en el negocio y cuáles deben cambiarse.

Balance

Un tema imprescindible es el cuidado del equilibrio entre la empresa y la familia. Este involucra el tiempo que se dedica a cada uno, el espacio que se da a las conversaciones del negocio en el hogar y viceversa, y el cuidado de las relaciones tanto amorosa como comercial.

Si bien el entretejido de los dos ambientes sostiene el proceso de desarrollo de ambos, demarcar límites y fronteras y construir puentes ayuda a la tranquilidad y el disfrute de cada espacio. Establecer horarios de trabajo y tiempos de descanso. Habilitar el compartir en familia y en pareja actividades neutrales y atractivas - paseos, espectáculos, vacaciones - que permitan el goce de experiencias distintas y también el descubrir al otro en aspectos nuevos. Y nutrir la relación, darán bases firmes al emprendimiento.

Bases fuertes

Hablar todo el santo día del negocio agota y compromete la relación con otros miembros de la familia. También, lavar en la empresa los trapitos sucios de casa es inadecuado y convierte a los empleados en testigos obligados de procesos íntimos. Y aunque muchas parejas intentan quitar el contenido emocional y físico de la relación interpersonal al negocio, esto es imposible. Hay que basar en esa fortaleza la capacidad de conectarse, de buscar el bien común, de alentar el crecimiento del otro como forma de crecer juntos y hacer crecer la empresa.

Recuadro

Buenas yuntas

Las parejas que han establecido negocios exitosos, tienen los siguientes elementos comunes:

Dan prioridad al matrimonio y a los hijos.
Los socios se respetan mutuamente y sus talentos y aptitudes son complementarios.
Definen cuidadosamente sus responsabilidades y dejan que cada uno se haga cargo de lo que le corresponde.
No compiten entre ellos, sino que se alientan y validan.
Recuerdan las cosas por las que se eligieron y buscan nuevas formas de encontrarse.

82 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Qué linda la columna; Andrea! Fresca, interesante y real. Trabajo con mi marido desde hace años, y pasamos por todo lo que decis. Me encantó y me sentí representada.
Gladys

Anónimo dijo...

¡Hola Andrea! Lo que decis se presta para cualuqier matrimonio también, aun cuando no trabajen juntos.
Graciela

Anónimo dijo...

¡El lugar! para mi es lo mas importante, tanto en la casa como en el trabajo, si te estas chocando todo el día surgen los problemas.
Juan

Anónimo dijo...

¡Ay Andrea! Haces parecer posible el trabajar con mi mujer!
Alberto

Anónimo dijo...

Muy buena la columna. Como siempre directa y clara.Sigo felicitando a La Opinión por incluirte.
Sofía

Anónimo dijo...

Me parece muy importante el tema de la competencia, tanto para los negocios de pareja como para las parejas que trabajan en distintas cosas.Es un lujo siempre tu columna.
María

Anónimo dijo...

Muy buena la columna!
Hugo

Anónimo dijo...

¿Crees que se puede manejar un negocio como se maneja una casa?
Belén

Anónimo dijo...

Muy buena la columna Andrea, y aunque no tengo un negocio con mi esposa, esta semana encontré en tu escrito una frase que los define impecablemente "el desafío de congeniar dos mundos tratando de lograr que ambos crezcan y se fortalezcan con la experiencia".
Como siempre, tu lector de todos los jueves.
Mario

Anónimo dijo...

Me gustaría que cuentes cuál es la realidad del Diario en el que escribís, si no me equivoco lo lleva adelante una flia.

Anónimo dijo...

Si ya tenes armado el negocio y el matrimonio hace rato ¿podes tratar de establecer estas cosas a esta altura?
Miriam

Anónimo dijo...

Y los celos? ¿Qué papel juegan?
Virginia

Anónimo dijo...

¿Y que pasa con las parejas que se forman en el trabajo? Siguen las empresas prohibiendo que trabajen esposos o novios?
Agustina

Anónimo dijo...

Qué es mejor? que el marido sea el jefe o que la mujer sea la jefa?
Bely

Anónimo dijo...

Me parece fundamental lo de preservar el amor de pareja.
Lilia

La Columna dijo...

¡Gracias Gladys!
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Graciela!

Sí, tabién se presta para matrimonios que no tienen un negocio, despues de todo, vivir en pareja ya constituye un gran emprendimiento.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Juan!

Si, es cierto. Contar con un lugar para trabajar es importante para la mayoría de las personas, pero en caso de parejas ayuda a mantener el equilibrio, a desarrollar roles propios y a darse aire.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Alberto!

Si es tu mujer, de alguna manera ya trabajan juntos
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Sofía!
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias María!

La competencia es una manera de enfocar las relaciones, que puede cambiarse. lo importante es reconocerla.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Hugo!
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Belén!
Creo que tienen puntos en común, y otros que cada uno podría prestarle al otro para optimizarlo.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Mario!
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Emilia!

La empresa que publica el Diario La Opinión es una empresa familiar, como muchas otras organizaciones del ramo editoriales en el mundo.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Miriam!
Sería una buena manera de re acordar temas y proponer estrategias ¿no?
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Virginia!
Los celos pueden encontrarse detrás de la competencia, en las suspicacias, en la comunicación incongruente y son letales tanto para la pareja como para el negocio
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Agustina!
Cada vez menos prohiben las empresas las parejas en el ámbito laboral, quizas porque se dieron cuenta que muchas de las mejores competencias que se buscan en los empleados, son las que otros empleados perciben y de las que se enamoran, y porque han descubierto que con una buen agestión, las parejas, mas que problemas, aportan al compromiso y a la motivación
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Bely!
Todo depende, qué marido, qué esposa, qué negocio sea...
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Lilia!
Es importante preservar tanto el amor como el negocio, pero a la hora de elegir la familia debe estar primero. Despues de todo, siempre puede armar otro negocio.
Hasta pronto
Andrea

Anónimo dijo...

Gracias por contestarme. ¿Alguna vez podes escribir una columna sobre el amor en el trabajo, las parejas, los no y los sí?
Agustina

Anónimo dijo...

¿Y si se divorcian pueden seguir con el negocio?
Guido

Anónimo dijo...

Conoci a mi mujer trabajando los dos en un negocio, y funcionaba, despues nos fuimos a vivir juntos, pusimos un negocio y la cosa se fue al diablo. Competíamos, no nos bancábamos en el papel de jefe/a del otro, no nos dábamos cuenta de cómo trabajar. Hoy no estoy casado ni tenemos el negocio, pero me hubiera encantado lograrlo y por ahi me hubiera servido leer tu columna antes.
Pablo.

Anónimo dijo...

Me parece muy interesante tu enfoque de las empresas familiares, me habian cansado con los famosos circulitos...¿podras hablar en algun momento de la sucesión?
Gracias
Luis

Anónimo dijo...

Asi que el contigo pan y cebolla se transforma en cuánto gano en la empresa familiar de parejas ¿a dónde quedó el romanticismo?
Sebastián

Anónimo dijo...

¿A qué te referís conque lo privado no se puede extrapolar a lo público? Eso no iría en contra de la congruencia comunicacional?
Berta

Anónimo dijo...

Nos gustó mucho la columna, Andrea.
La familia tiene un negocio que levantaron el abuelo y la abuela hace tiempo. Ellos nos enseñaron a todos lo que vos mencionas en tu escrito.
Luis y Macarena

La Columna dijo...

¡Hola Agustina!
Como no, tendré en cuenta el tema, gracias
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Guido!
Eso dependerá de cada pareja, hay quienes eligen eso y quienes prefueren cortar tod.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Pablo!
A veces las cosas se dan así. Con el tiempo, es impotarte validar la experiencia como catalizadora del crecimiento.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias a vos Luis!
Si, en algún momento enfocaré el tema de la sucesión desde la perspectiva que yo puedo darle.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Sebastian!
El romanticismo puede estar en todas partes, y en los negocios de pareja es un ingrediente fundamental.Además el contigo pan y cebolla habla también de sacrificio, acompañamiento, sostén, cosas muy importantes a la hora de hacer negocios.
Hasta luego
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Berta!

Podría ser que no comunicando cosas de lo privado en lo públicio cayeran en una incongruencia pero no necesariamente. Como ejemplo: las crisis de llanto, por ejemplo, o las peleas a los gritos, o las muestras de amor apasionado, son podriamos decir un tanto "impresentables" en el ámbito de los negocios.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Luis y Macarena!
No hay mejor modo que aprender de un negocio familiar, que ver cómo lo levantaron y sostuvieron los iniciadores, para descubrir las bases y comprenderlas, asi cualuqier cambio las fortalece y continúa.
Hasta pronto
Andrea

Anónimo dijo...

¿Es mejor que otras empresas familiares una de pareja?
Sofía

Anónimo dijo...

¿Dirias que el gobierno es hoy una emresa familiar de pareja?
Sara

Anónimo dijo...

Vos crees que son muchas las parejas que se forman luego de hacer negocio juntos?}
Valentina

Anónimo dijo...

Te vamos a escuchar en la radio hoy!
Los amigos de la oficina gris

Anónimo dijo...

Quiero una columna sobre el amor en el trabajo.
Gracias
Melina

Anónimo dijo...

¡Genial la charlita de hoy en la radio! Ya tengo un plan escrito y esta tarde realizare mi primera accion
Los adoro!
Macarena

Anónimo dijo...

Muy buena la columna de la radio!
Los amigos de la oficina gris

Anónimo dijo...

Dan fuerza, incentivan, dan confianza. ¡Me encantan tus columnas de la radio y la compañía que te hace el Oso!
Amelia

Anónimo dijo...

Me parecio muy interesante lo de no enfocar los objetivos con el no, y la idea de abrir puertas y espacios con otros objetivos
Luisa

Anónimo dijo...

¡Qué dúo ustedes dos! ¿Cuando van a hacer todo un programa?
María

Anónimo dijo...

¡Qué pasa si tenes escritos miles de planes y no haces nada de nada?
Sebastián

Anónimo dijo...

A mi tambien me gustó que resaltaras esa frase del oso "un espejo para el compromiso" . Creo que los dos se llevan genial, que se escuchan y se valoran y se dan espacio. Bueno, se nota Andrea que haces lo que propones. La columna en la radio es muestra de eso.
Mario

Anónimo dijo...

Excelente la propuesta de esta mañana. Suelo decirme, no voy a ...no quiero seguir...y me di cuenta al escucharte Andrea que eso no me deja mucho "espacio de posibilidades" como decis...Ya escribi mis metas son el no inicial, y las noto mucho mas atractivas ¡Gracias!
Rocío

Anónimo dijo...

Me encantó eso de que con el lenguaje creamos realidades...¿podes escribir una columna de eso o hablar mas de eso en la radio?
Gracias
Lupe

Anónimo dijo...

Me gusta como se divierten, comparten ideas y nos enseñan.
Marilú

Anónimo dijo...

Se nota que lo hacen naturalmente, eso de conversar sobre un tema. Creo que no solo es original la temática, sino la forma en que la desarrollan juntos, en un ir y venir.
Carlos

Anónimo dijo...

Esto para mi es esencial 2Habilitar el compartir en familia y en pareja actividades neutrales y atractivas2. CCuando nosotros nos dimos cuenta de esto, la cosa empezo a mejorar.
Bibiana

Anónimo dijo...

Despues de escucharte hoy me fui a buscar las viejas columnas y vos habías hecho una sobre metas y objetivos que está genial.
Ana

La Columna dijo...

¡Hola Sofía!
Ni peor ni mejor, diferente.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Sara!
No, no es una empresa familiar, es una organización, dos de cuyos principales roles están cubiertos por una pareja.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Valentina!
No tengo datos al respecto
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias amigos por escucharme!
Andrea

La Columna dijo...

Gracias Melina por proponer el tem
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Felicitaciones Macarena!
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias de nuevo amigos!
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Amelia! Pero en realidad, yo le hago compañía un rato a Héctor...
Andrea

La Columna dijo...

Me alegro Luisa!
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola María!
¿Qué queres decir con que dúo?
Gracias por animarnos a hacer un programa
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Sebastián!
No tenes problemas para planificar, sino para realizar. ¡Adelante!
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Mario!

Andrea

La Columna dijo...

¡Muy bien Rocío! Seguramente son mas atractivas y vas a ver que más facilmente realizables.
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Hola Lupe! Cómo no, ya voy a escribir sobre ese tema, gracias por proponerlo
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Marilú!
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Carlos!
Andrea

La Columna dijo...

¡Sí, Bibiana! es que hay que condimentar los negocios y reservarse espacios de compartir otras cosas
Hasta pronto
Andrea

La Columna dijo...

¡Gracias Ana!
Hasta pronto
Andrea

Anónimo dijo...

Te hemos descubierto hace poco...te conocemos de una capacitación en Resistencia, Chaco y nos encantan tus columnas.
Te deseamos lo mejor,
Agustina y Omar.

La Columna dijo...

¡Gracias Agustina y Omar!
Hasta pronto
Andrea