28.2.08

La Columna, edición del 28 de Febrero de 2008

Comunicación Verbal


A buen preguntador, respuestas claras


Simples, obvias, cotidianas, las preguntas encierran todo el potencial de una verdadera herramienta de comunicación.

Nos ayudan, asustan, sorprenden, habilitan, obligan, y salvan. Las espetamos, decimos tímidamente, soltamos como al descuido, las blandimos como armas. Son el bastón de la duda y también una poderosa herramienta de Comunicación.

Las preguntas efectivas son la llave para abrir la comunicación con los demás. Elementos centrales de todo proceso de coaching, son también vitales a la hora de conseguir información, comprender procesos y entender puntos de vista. Saber realizarlas no sólo hará más efectivo cualquier intercambio sino generará un entorno de confianza, validación y seguridad para ambos interlocutores.

Las claves

Una buena pregunta es:

Breve. Para mantener la atención del interlocutor y evitar tener que repetirla.

Clara. Las preguntas claras no llevan voz pasiva, palabras rimbombantes, conceptos de varios significados, negativas superpuestas. ¿Nos reunimos mañana a las 9 de la mañana? en lugar de “Habiendo hecho lo que propusimos ¿no será mejor que dejemos la reunión para mañana?

Simple. Una pregunta efectiva se refiere a un solo tema. Si se nos ocurren varias preguntas, lo ideal es que las separemos, y las formulemos de a una.

Pertinente. Las preguntas que se desvían del tema se llevan con ellas la atención del interlocutor, y pueden hacer perder el hilo de la conversación.

Constructiva. Enfocarse en el aspecto positivo alentará un buen intercambio.

Neutral. No confundir neutral con neutro. Las preguntas pueden ser controvertidas e interesantes, pero no tienen que influir la respuesta. A veces, intencionalmente o no, utilizamos preguntas sesgadas para inducir la respuesta. Por ejemplo, con la pregunta negativa:¿No deberías cambiar tu actitud? o preguntando “¿verdad?” o ¿realmente?

Abierta. Las preguntas de final abierto usualmente comienzan con Dónde, Cuándo, Qué, Quién, Cuál o Cómo. Mantienen la comunicación porque llevan a la obtención de información. Se diferencian de las preguntas de final cerrado, que llevan a Sí o No como respuesta, y generan un vacío que no alienta la conversación. Muchas de las preguntas de final cerrado sólo dejan espacio al acuerdo, sobre todo en los casos de relación asimétrica, esto es cuando el que pregunta tiene ascendencia sobre el que contesta.

Tipos de preguntas

Veamos ahora algunos tipos de preguntas que están a nuestra disposición para optimizar nuestro rol de “preguntones” y en qué momento es oportuno realizarlas:

Preguntas concretas o convergentes: Hacemos preguntas concretas cuando queremos conocer hechos. La pregunta “¿Cuántos años hace que trabajás acá?” requiere como respuesta una cifra, no una evaluación. Es una pregunta concreta o convergente dado que es objetiva y habitualmente lleva a una única respuesta.

“¿En cuántos años creés que el negocio alcanzará su madurez?” puede responderse con un número sin embargo no es concreta, sino divergente, ya que puede tener más de una respuesta. Las respuestas a preguntas divergentes son necesariamente subjetivas y se inscriben en el campo de las opiniones e interpretaciones.

La respuesta a una pregunta concreta puede verificarse con otra fuente. Las opiniones pertenecen a quien las comunica, y no son verificables de la misma manera que los hechos concretos. Las opiniones consideradas como si fueran hechos, hacen perder tiempo y energía y llevan a malentendidos.

Preguntas que generan explicaciones: Son los famosos “por qué”. Los especialistas en ellos son los niños de tres años.

Sirven para conseguir información adicional sobre un hecho, pero deben ser formuladas cuidadosamente y en tono neutral, para evitar que el interlocutor se sienta “interrogado”. ¿Por qué no está terminado este proyecto? por ejemplo, es más urticante y provocativa que ¿En qué estado está el proyecto? ¿Cuál es el próximo paso?

Preguntas de resumen: Pueden abrir la revisión sobre lo hecho, por ejemplo, al finalizar reuniones o clases. Ayudan a sintetizar y dan la posibilidad de reconocer lo logrado.

Preguntas de evaluación: Deben ser concretas, directas y abiertas. Se usan para revisar procesos, para obtener opiniones sobre un trabajo, para promover la reflexión en una reunión de evaluación de un equipo.

Preguntas posibilitantes: Son las que hacen sentir libre de expresarse al interlocutor. Así preguntar “¿Cómo te estás sintiendo?” o “¿Qué emociones te produce la cercanía de la inauguración? abre mas posibilidades que las preguntas “¿Te pusiste incómodo?” o “¿Cómo manejás tus miedos?”.

En concreto

Un buen preguntador prepara sus preguntas y da tiempo para pensar. Considera al silencio no sólo como una respuesta aceptable sino como el espacio para nuevas percepciones. La mejor manera de enviar un mensaje de contención y respeto es dar al otro el tiempo de formular y articular una respuesta.

Recuadro:

Las malas de la película.

Preguntas de respuesta inducida o sugerentes: Con ellas damos nuestra opinión, disfrazada de interrogante. “¿No te parece que es mejor que no hables con tu jefe?”, es un ejemplo. Un comunicador responsable y comprometido con la independencia de su interlocutor no induce o sugiere respuestas.

Preguntas retóricas: Incluyen la respuesta. ¿Qué otra cosa que sí, puede contestar alguien a “¿Te interesa el bienestar de tu familia”?, “¿Querés hacer bien el trabajo, verdad? A veces generan hostilidad y coartan el diálogo y la cooperación, ya que suenan a “manejo” o manipulación.

Comentarios a La Columna " Diferencias generacionales como riqueza"

Anónimo Anónimo dijo...

"Yo nací en 1963...casi cayéndome de los baby boomers, y me identifico mucho con los tradicionalistas...aunque soy ecológica como los del milenio..." ¿qué soy?
Me gustó la columna,
Clau

21 de febrero de 2008 9:41


Anónimo Anónimo dijo...

No me gustó cómno salió La Columna hoy en el diario. recién entendí cuando vine al blog. ¡Los comentarios del final iban en el recuadro! así sí.

Muy preciso el tema de las diferencias. Creo que los jóvenes tienen otro concepto del esfuerzo y de la necesidad de trabajo. Me puse a pensar en qué cosas habían vivido las diferentes generaciones y claro...las cosas fueron cambiando.
...sí, yo me levanto temprano por eso tuve ya tiempo de leer el diario...

Luis (by Macarena)

21 de febrero de 2008 9:51


Anónimo Anónimo dijo...

A mi me resultó re claro lo de las distintas frases como "Vivir para trabajar". Tengo compañeros mas grandes y mas jovenes que yo en el trabajo, y creo que las diferencias se hacen notar cuando nos apuran con las entregas.
Marga

21 de febrero de 2008 10:22


Anónimo Anónimo dijo...

¿Con qué tienen que ver las diferencias?
Los 5

21 de febrero de 2008 11:06


Anónimo Anónimo dijo...

Me gustó el enfoque que diste a La Columna, hablando de la riqueza de las diferencias. Todos, tengamos la edad que tengamos podemos aportar y ayudar.
Gracias!
Amanda

Y la radio, ¿para cuándo?

21 de febrero de 2008 11:15


Anónimo Anónimo dijo...

Pertenezco a la generación de transición. Coincido en que fuimos los protagonistas del avance tecnológico, pero olvidamos algunas otras cosas, que tomaron los jóvenes: la ecología, la solidaridad. ¡Bien por ellos!
Seguis haciendonos pensar. Gracias.
Rolo

21 de febrero de 2008 12:06


Anónimo Anónimo dijo...

Me gustó la inclusión de testimonios, uno se identifica con algunos.
Me gustaría saber las diferencias de estos grupos con respecto a la educación.
Chau
Ezequiel

21 de febrero de 2008 12:10


Anónimo Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo, a mi me enseñaron que los chicos mejor calladitos y a no moverse. Pero no enseñé eso a mis hijos , y ellos a mis nietos tampoco, por lo que creo que ganamos en calidad de vida.
Muy buenas todas tus columnas
Mabel

21 de febrero de 2008 21:08


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Luis y Macarena!

¡Su comentario es un ejemplo de colaboración intergeneracional!

Gracias por aclarar lo de la diagramación de la nota en el diario y hasta pronto.
Andrea

22 de febrero de 2008 10:44


Anónimo Anónimo dijo...

Soy de la generación x. Creo que te faltó decir que somos escépticos e informales, además de divertidos.
Me interesa que hables de la comunicación de cada generación con los jefes.
Buenísimo este combo de columna y blog!
Manu

22 de febrero de 2008 10:48


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Marga por tu comentario!

Las diferencias suelen notarse más cuandl las emociones están a flor de piel, las exigencias aumentan y uno tiene menos tiempo de "prepararse" para mostrar cómo es.
Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:49


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Clau por tu comentario!

La división en generalidades de cada generación se realiza con fines prácticos pero no es tan taxativa.

Crianza, educación, intereses, decisiones, elecciones, van haciendo que cada uno tenga diferentes concepciones del trabajo, adopte actitudes o valore determinadas cosas, aunque haya nacido y crecido en tal o cual época.

El ser ecologista, por ejemplo, tiene que ver con la conciencia, la ubicación en el momento y la decisión de hacer algo al respecto.

Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:43

22 de febrero de 2008 10:50


Blogger La Columna dijo...

¡Hola los 5!

Las diferencias tienen que ver con lo biológico, la época, lugar y familia en la que uno nació y creció,las características personales, con la cultura laboral en la que desarrolló su trabajo, con la interacción con los compañeros de trabajo, con las experiencias, con la capacidad de cambio, con la conciencia de la realidad, etc, etc, etc.

Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:53


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Amanda!
Inclusivo y generoso tu comentario
Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:54


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Rolo!

Por ahi no es que lo olvidaron, sino que en distintas epocas se toma conciencia de necesidades diferentes y la sociedad sostiene determinadas propuestas.

Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:55


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Ezequiel!

¿Al hablar de educación, te referís a la propia educación o a su rol de padres y educadores?
Por favor aclarame esto y seguimos charlando.

Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:56


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Mabel!

Crecieron seguramente en posibilidades de comunicación. El papel de los hijos en la familia ha ido variando con el tiempo.Esa posibilidad de hablar y compartir ha dado seguramente a estas nuevas generaciones otro modo de pararse para plantear cosas, otra facilidad de decir lo que piensan.

Hasta pronto
Andrea

22 de febrero de 2008 10:59


Anónimo Anónimo dijo...

¿Vos queres decir que son mejores porque pueden decir mas?
Gracias por contestarme
Mabel

22 de febrero de 2008 11:00


Anónimo Anónimo dijo...

Me gustaría que des mas estrategias organizacionales para manejar las cuatro generaciones.
Yo tengo empleados grandes, son los más leales, empleados medianos, son los mas trabajadores y empleados jóvenes, son los más creativos.
Felicito a La Opinión y a vos por estos temas y la forma en que los presentan (aunque a veces los mezclen en el diario. Son un toque de calidad.
Mario

22 de febrero de 2008 12:13


Anónimo Anónimo dijo...

Buen día! A qué vivencias te referís en cada generación? Me pareció muy clara la diferenciación y coincido con las diferencias en la concepción del trabajo. Mi mamá se enorgullece de su nieto trabajando en la casa para una empresa norteamericana, pero no puede dejar de preocuparse por la estabilidad laboral. El, en cambio, ni piensa en eso. Y yo considero que es tan capaz que se va a poder ubicar en cualquier lado.
Un gusto leerte.
Isabel

23 de febrero de 2008 10:13


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Manu por tu comentario en el que agregaste características de la generación x!.

La comunicación con los jefes tiene que ver con la relación con la autoridad y la conciencia de la propia ubicación.Seguimos con las generalidades: Los tradicionalistas tienen mayor tendencia al respeto y el acatamiento los boomers son más participativos, proponen y comparten información, en tanto los
x son de solicitar feedback como forma de saber si van por el buen camino. Los del milenio en cambio dan y piden información cuando lo necesitan.

Hasta pronto
Andrea

23 de febrero de 2008 10:27

Blogger La Columna dijo...

¡Hola Mabel!
No necesariamente son mejores porque pueden decir más. Decir más o más directamente no implica decir bien, decir con cuidado, validar al otro como interlocutor y ser oportuno al decir.

Han crecido con otras libertades. pero el uso de esas libertades tiene que ver con cada uno.

Hasta pronto
Andrea

23 de febrero de 2008 10:31


Anónimo Anónimo dijo...

A mi no me costó decidir la carrera y hoy veo a mi hijo devanándose los sesos para hacerlo. ¿tiene que ver eso con las diferencias generacionales?
Manuel

23 de febrero de 2008 10:34


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Mario!

Creo que el poder diferenciarlos y valorarlos ya es un paso importante en la gestión de las generaciones.
Podriamos conversar mucho de esto pero, dar lugar a la expresión de cada generación con respecto a la tarea, ampliar la posibilidad de intercambio de información y habilitar la "docencia" entre unos y otros, y facilitar que cada uno contribuya y sea parte del crecimiento del departamento o de la organización, ayudará a que cada generación luzca y aporte.

Hasta pronto
Andrea

23 de febrero de 2008 10:40


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Isabel por tu comentario!

Lo que comentás tiene que ver absolutamente con la percepción del trabajo: para tu mamá la estabilidad es primordial, pensá que ella viene de una generación en la que el empleo público era lo más seguro y apetecible. Vos crees en el desarrollo personal y la búsqueda de una carrera basándose en las capacidades , y buscando un lugar en donde aplicarlas. Tu hijo vive esa posibilidad.

Las vivencias tienen que ver con los hechos. Te propongo que investigues qué pasaba en el mundo y en la Argentina en esos años.
Hasta pronto
Andrea

23 de febrero de 2008 10:49


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Manuel!

No sé si con las diferencias generacionales o con la oferta diferente y ampliada que hay hoy, la libertad de elección que uno y el otro tuvieron, el espacio que cada uno se dio y se da para pensar, las presiones, las posibilidades...

Quizás también la distancia te da la posibilidad de verlo fácil, pero es un tema complejo. Lo ideal es acompañar a tu hijo no enfocándose en las diferencias sino en lo que él necesita a partir de lo que vive.
Hasta pronto
Andrea

23 de febrero de 2008 10:52


Anónimo Anónimo dijo...

Sabés? Tras leer tu columna me fui a buscar músicas de las cuatro generaciones. ¡es genial! las cosas que se decían y se dicen, la forma en que se cantaba y se canta al amor, el lugar de la mujer y de la pareja...impactante.

Tu columna es genial.
Pato

23 de febrero de 2008 10:55


Anónimo Anónimo dijo...

Mi abuelo solía atender las llamadas telefónicas de trabajo en la oficina solamente, mi papá lo hacía en el trabajo y en casa a toda hora estaba disponible, yo puse contestador y regulo mis llamadas y no contesto llamadas laborales después de las 18 horas, y mi hijo no vive sin su celular, contesta llamadas de todo tipo todo el tiempo, para archivos y mensajes hasta desde la pileta...en cierto modo, es como mi papá ¿qué pasó?
Emilio

23 de febrero de 2008 11:06


Anónimo Anónimo dijo...

La música, si ...¿y las películas?
Antes todos fumaban, no cuidaban a los animales...no se trataban temas sociales...
Disparadora La Columna, ¿eh?
Los 5

23 de febrero de 2008 13:07


Anónimo Anónimo dijo...

Y el tema de la plata... los viejos ahorraban, los baby boomers compraban ahora y pagaban despues , los x volvieron a cuidar pero sin poder ahorrar y los milenios creen que se merecen gastar...
Elías

23 de febrero de 2008 13:21


Anónimo Anónimo dijo...

También han cambiado las familias y su estructura.
Me parece que estamos charlando un poco entre todos. Eso es lo fantástico de estos temas, que nos invitan a comentar y a aportar y querer saber más.
¡me gusta mucho!
Betty

23 de febrero de 2008 13:28


Anónimo Anónimo dijo...

Me gustó eso de que para algunos la educación era un sueño, gracias al sueño de mis padres, yo pude estudiar.
Muy buena la columna.
Beatriz

23 de febrero de 2008 13:36


Anónimo Anónimo dijo...

¿Qué crees que hizo que las generaciones x y del milenio se volcaran a generar sus propios trabajos, desarrollaran empresas, etc.?
Juan

23 de febrero de 2008 20:31


Anónimo Anónimo dijo...

Perdón que no te contesté antes, la tormenta nos dejó sin internet. me refería a su propia educación, pero también me interesa si tenes datos sobre su forma de educar.
Gracias
Ezequiel

23 de febrero de 2008 20:36


Anónimo Anónimo dijo...

Creo que la gran diferencia entre mi abuelo y mi hijo es que para mi abuelo la estabilidad se la daba la empresa y mi hijo tiene estabilidad él mismo.¿Necesito babero?
Isabel

23 de febrero de 2008 20:57


Anónimo Anónimo dijo...

é ayer a ver un pedacito de un programa sobre Google y me acordaba de tu columna. Es un trabajo alucinante!
Macarena

24 de febrero de 2008 10:04


Anónimo Anónimo dijo...

En La Nación de hoy (página web) hay un comentario sobre un blog de una cubana de 32 años, que escribe con su nombre aunque no desde la libertad. El blog se llama generación y y me pareció emblemático de lo que comentabas.
Muy buena semana para todos
Gonzalo

24 de febrero de 2008 10:25


Anónimo Anónimo dijo...

Yo también vi el programa de google en TN, interesantísimo. ¿Crees que esa posibilidad de apertura tiene que ver con la gente que trabaja o con los dueños de la empresa? ¿se da esto en otras empresas? ¿Es un modo actual?
A mi me encantaría trabajar así, aunque no sé si me bancaría tantos perritos en el pasillo.
Joaquín.

24 de febrero de 2008 11:23


Anónimo Anónimo dijo...

Creo también que el uso de la tecnología determinó grandes cambios en el trabajo.
Re interesantes la columna y los comentarios y las respuestas.
Magali

24 de febrero de 2008 12:45


Blogger La Columna dijo...

¡Muy interesante tu propuesta de revisar músicas, Pato! Gracias por compartirla.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 9:48


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Emilio!

Puede ser que tenga que ver con la articulación que unos y otros hacían o hacen de su vida personal y laboral. La delimitación de esos dos ambos tiene fundamentalmente que ver con una decisión personal, y la tecnología ha ayudado a trasponer límites y facilitar accesos.

Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 9:52


Blogger La Columna dijo...

¡Hola los 5! Sí, las películas reflejan los que la sociedad vive...pero podríamos discutir largamente si antes no se presentaban temas sociales....
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 9:54


Anónimo Anónimo dijo...

No estoy de acuerdo con Elías, a mi me cuesta ganar el peso y creo que me merezco gastarlo cuando me costó ganarlo, si no no.
Eugenio

25 de febrero de 2008 9:55


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Elías!

Interesante tu aporte que creo relaciona directamente el uso del dinero con la consideración del mismo pero también con la disponibilidad y el acceso.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 9:58


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Betty!

Sí, ese intercambio es muy bueno, y cumple la función de este blog.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:00


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Beatriz!

Mucho de lo que las generaciones logran tiene que ver con lo que las anteriores soñaron...me parece.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:01


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Juan!

Creo que tuvo que ver con el desarrollo de la tecnología, con el fácil acceso a las comunicaciones que abrió la posibilidad de trabajar en otros lugares, con el cambio en la forma de las empresas, con la variación en el modo de ganar dinero, hoy muchas empresas florecen dando servicios gratuitos a sus usuarios, por ejemplo, y también con un crecimiento en la capacidad del ser humano para perseguir sus propios sueños y desarrollar sus objetivos. El entrepeneurismo ha florecido en los últimos tiempos debido a los cambios sociales e individuales.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:05


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Isabel!

Sí, creo que eso tiene mucho que ver, los jóvenes han crecido en autonomía laboral...pero además ¿qué importa si necesitas babero?, ¡es bueno que estes orgullosa de él!
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:08


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Macarena!
Sí, Google es una empresa bien del Milenio, sus empleados no tienen mas de 30 años y sus características son la apertura, la creatividad y la libertad.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:10


Anónimo Anónimo dijo...

¿Crees que en el futuro todas las empresas serán como Google?
Los 5

25 de febrero de 2008 10:11


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Gonzalo!

Conozco el blog y es un excelente ejemplo.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:12

Suprimir
Blogger La Columna dijo...

¡Hola Juan!

Creo que esa forma de trabajar tiene que ver con los dueños y con los empleados,y que definitivamente es una forma actual. Hay otras empresas en las que determinados departamentos tienen una forma parecida, como Lego y Microsoft.

Soi orientas tu carrera y tu búsuqeda de trabajo a empresas así, lo vas a lograr...en cuanto a los perritos...será cuestión de acostumbrarse...

Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:16


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Magali!
Si, coincido con vos , la tecnología ha tenido mucho que ver con los cambios.
Hasta pronto
Andrea

25 de febrero de 2008 10:18


Anónimo Anónimo dijo...

Sé de gente acá en Trenque Lauquen que trabaja por internet con gente de Buenos Aires y de Estados Unidos...es una tendencia que se instala.

Me gustan los temas que tratas en la columna.
Me gustaría escucharte en radio y que estos intercambios del blog se pasaran por Omega.
Bea

25 de febrero de 2008 10:34


Anónimo Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo, yo también quiero esto en la radio.
Amanda

25 de febrero de 2008 11:39


Anónimo Anónimo dijo...

¡Hola Andrea! Con eso de habilitar la docencia ¿a qué te referís concretamente? Esta Columna es un recurso valioso para empleados y también para jefes y empresarios.
Gracias
Mario

25 de febrero de 2008 12:41


Anónimo Anónimo dijo...

Me gustó tu frase "la identidad generacional distingue pero no tiene por qué dividir". Creo que sirve para la familia, la amistad, la sociedad y por supuesto, como pensaste, para el ámbito de las organizaciones.
Aprecio tu interés en compartir con nosotros estos temas y la forma en que los presentas.
Yo también te escucharía por radio.
Gracias
Marikena

25 de febrero de 2008 13:46


Anónimo Anónimo dijo...

La máquina de escribir...lo que me costó dejarla! Lo bueno de la computadora es que tengo ahora a mis nietos a mano con la cámara e internet...también mi hija sube las fotos del bebé y las puedo disfrutar...Nací allá por otra generación pero gracias a la paciencia de los más jóvenes, me acomodo a las nuevas tecnologías...
Te leo desde Santa Rosa y hoy me animé a dejar este comentario.
Zulema

25 de febrero de 2008 14:00


Anónimo Anónimo dijo...

Me identifique con el comentario de Rita, pero para mi la gran diferencia esta en la capacidad de esfuerzo...los jóvenes, quizás porque no tuvieron que hacer esfuerzo, no han desarrollado esa capacidad...
María Elena

25 de febrero de 2008 16:50


Anónimo Anónimo dijo...

Tendríamos que definir que es capacidad de esfuerzo, pero de cualquier forma creo que en todos radica esa capacidad, que se despiereta de acuerdo con lo que se vive.
Me gusta mucho La Columna y este espacio.
Carlos

25 de febrero de 2008 18:42


Anónimo Anónimo dijo...

A mi no me molestan los masters, al contrario, pero me vuelven loco los malos modos, la impertinencia, la falta de atención, el llevarse el mundo por delante, de jóvenes y no tan jóvenes.
Estos son temas de los que hay que hablar, por eso celebro tu La Columna y felicito a La Opinión.
¿Radio? Buena idea...con este mismo estilo.
Raúl, de bastante mas de 55

25 de febrero de 2008 20:14

Suprimir
Blogger La Columna dijo...

¡Hola Eugenio! Gracias por aportar tu punto de vista, lo que enriquece el intercambio
Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:34


Blogger La Columna dijo...

¡Hola los 5!

No creo que todas, dependerá de su producción, de la gestión, de su ubicación. Google produce software, por lo que puede generarlo en esa suerte de campus que mostraba el reportaje, y subirlo a la red con servidores en cada zona del mundo, eso le da características especiales.
Quizas si las empresas van a crecer en creatividad y libertad pero dependerá de su situación.

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:38


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Bea por tu comentario!

Sí, el trabajo en casa es hoy una realidad para muchos y eso determinará nuevos usos y costumbres.

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:40


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Amanda!
Andrea

26 de febrero de 2008 8:41


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Mario!

Habilitar la docencia tiene que ver con abrir espacios y tiempos en los que se pueda compartir el conocimiento, se conozca no sólo lo que hace el compañero de trabajo sino también cómo lo hace, esto favorece la valoración y el reconocimiento y genera mejoreas climas laborales.

Gracias por tu comentario
Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:44


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Marikena!

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:46


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Zulema!
El tuyo es un ejemplo de las posibilidades que tiene mucha gente de usar la tecnología para mejorar su calidad de vida tenga la edad que tenga.

Para mí, la tecnología ha dado al hombre la posibilidad de comunicarse con un alcance como nunca antes había tenido.

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:50


Blogger La Columna dijo...

¡Hola María Elena!

Creo que lo que ha variado es la intención del esfuerzo, es decir a qué se aplica, y por supuesto esto varía en cada caso.

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:53


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Carlos!

Es una visión más optimista ¿verdad?

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:56


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Raúl!

No hay edad para los buenos modos y la consideración y validación del otro.

Hasta pronto
Andrea

26 de febrero de 2008 8:57


Anónimo Anónimo dijo...

Coincido con vos, Andrea , en que lo que varió fue la intención del esfuerzo, creo que antes tenía mas que ver con el "deber ser" y ahora es una elección más personal. Hoy los chicos ponen el esfuerzo en lo que les interesa, antes era una forma de vida el esforzarse.
Juan

26 de febrero de 2008 9:00

Suprimir
Anónimo Anónimo dijo...

Por otra parte tienen la fortaleza de alejarse de lo que no quieren o no va con sus principios, como la chica que dejó el trabajo porque fabricaban juguetes de PVC.
También pienso que lo pueden hacer porque los hemos criado con esa libertad.
Muy buenos temas siempre en La Columna.
Cristina

26 de febrero de 2008 14:26


Anónimo Anónimo dijo...

Te digo que con esto de comentarte en el blog yo tambien estoy dando pasos en un camino cultural extraño, aunque he visitado blogs de gente de mi edad y le estoy tomando el gusto.

Luis (by Macarena) (¿viste que lo adoptamos?)

26 de febrero de 2008 14:43


Anónimo Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con que diferentes vivencias nos dan diferentes puntos de vista. Y considero que comprender esto tiene que ver con la sabiduría.
Hasta la próxima
Laly

26 de febrero de 2008 20:43


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Juan por tu comentario!

Quizás eso tenga que ver con la libertad de elección pero también va de la mano de la responsabilidad de elegir bien.
Hasta pronto
Andrea

27 de febrero de 2008 7:47


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Cristina por tu comentario!

Cada generación desarrolla libertades de las que la anterior careció o no necesitó...también es cierto que para lograr esas libertades se apoya sobre los pasos ya dados...

Hasta pronto
Andrea

27 de febrero de 2008 7:51


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Luis y Macarena!

Me alegro que estés conociendo el mundo de los blogs, hay material muy interesante.

Hasta pronto
Andrea

27 de febrero de 2008 7:52


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Laly por tu comentario!

Hasta pronto
Andrea

27 de febrero de 2008 7:53

Suprimir
Anónimo Anónimo dijo...

Te he escuchado decir en un taller que "mejor focalizarse en el contenido de lo que se dice y no en el estilo del interlocutor". Yo lo aplico cuando tengo que hablar con mis compañeros de trabajo muy jóvenes, no veo los piercing y así los escucho porque lo que dicen es valioso.
Muy buena la nota
José

27 de febrero de 2008 7:56


Anónimo Anónimo dijo...

Me gustó la columna para aplicarla en casa, en donde convivimos 4 generaciones, a veces generando riqueza y a veces no, pero la mayoría de las veces disfrutándolo.
Siempre leo con interés tus notas y también los comentarios que nos regalás a cada uno. Esa dedicación es muy valiosa.
Majo

27 de febrero de 2008 16:36


Anónimo Anónimo dijo...

Estuve de viaje, seguí tu columna en el blog. Me gustó la forma en que proponés la comunicación y el aprendizaje intergeneracional.
Hay lugar para todos
DM

27 de febrero de 2008 17:29


Anónimo Anónimo dijo...

Eso de generar proyectos que desafíen las habilidades de cada uno me parece genial. ¿Tenés algún ejemplo?
Y mañana ¿que otra cosa para pensar nos vas a traer?
Mario

27 de febrero de 2008 20:16


Blogger La Columna dijo...

¡Hola José, gracias por tu comentario!

Y cuanto nos tienta quedarnos pegados con el juicio al otro en lugar de conectarnos con él, redescubrirlo, conocerlo, verlo más como es que como queremos verlo...
Hasta pronto
Andrea

28 de febrero de 2008 10:03


Blogger La Columna dijo...

¡Gracias Majo! ¡Qué bueno, una familia con cuatro generaciones para disfrutarse! Claro que requiere amor, comprensión y trabajo!

Hasta pronto
Andrea

28 de febrero de 2008 10:04


Blogger La Columna dijo...

¡Bienvenido DM! Y sí, claro que hay lugar para todos, y cosas que todos pueden aportar...
Hasta pronto
Andrea

28 de febrero de 2008 10:06


Blogger La Columna dijo...

¡Hola Mario!

Por favor pasame una dirección de mail que te mando información al respecto.
Gracias
Andrea

28 de febrero de 2008 10:09